Marina Lobo denuncia el modus operandi de muchos personajes vinculados a la extrema derecha: utilizar el ruido mediático para encubrir delitos financieros y manipular a la opinión pública.
En «Hasta el coño de» (HECD), Marina Lobo dedicó una sección a profundizar en el escándalo que rodea a Alvise Pérez, el conocido agitador de la ultraderecha, vinculado ahora a una red de corrupción, criptomonedas y un club de alterne. Alvise, conocido por sus polémicas campañas en redes sociales, está siendo investigado por una trama que implica pagos en criptomonedas y su conexión con empresarios que gestionan locales de ocio nocturno. Según la información revelada, Alvise habría utilizado estos negocios como tapadera para ocultar fondos y blanquear dinero, todo ello en un contexto de financiación ilegal para sus actividades políticas.
El programa también destacó el uso que Alvise hizo de su plataforma mediática para desviar la atención de sus actividades ilegales. Mientras sigue presentándose como una víctima de la censura y un defensor de la «libertad de expresión», la realidad es que está siendo investigado por evasión de impuestos y fraude. Marina, con su estilo crítico y directo, señaló cómo esta situación refleja el modus operandi de muchos personajes vinculados a la extrema derecha: utilizar el ruido mediático para encubrir delitos financieros y manipular a la opinión pública.
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