Tras la publicación de los audios de Villarejo Jordi Juan, director de La Vanguardia, ha sido contundente al respecto.
«Los medios asumen una necesaria exigencia de ética pública: divulgar contenido es fácil, pero lo verdaderamente difícil, la tarea imprescindible del buen periodismo, es transformar esa información en un producto de calidad, profesional y equilibrado”, comienza Jordi Juan, director de La Vanguardia, citando a Felipe VI en la entrega de los premios Mariano de Cavia en la sede de Abc el pasado jueves .
«Los audios de las conversaciones del excomisario José Manuel Villarejo con distintos políticos o policías han revelado que toda esta trama ha podido llevar a buen puerto sus campañas de intoxicación e invenciones porque han contado con periodistas y medios de comunicación dispuestos a publicarlos», continúa.

«Todavía hoy es fácil reconocer la mano de esta trama en la firma de algunas noticias que aparecen en distintos medios reputados. Sobre este tema parece que nadie se da por enterado y ni los colegios profesionales, ni asociaciones de periodistas ni, por supuesto, los propios medios de comunicación señalados han abierto la boca para denunciar las manipulaciones o para defenderse», sentencia.
«Al final, se extiende el descrédito a toda la profesión, que es hacerlo también a todos los medios, incluso a los que tuvieron acceso a ese tipo de información y no la quisieron publicar porque no cumplía los mínimos requisitos para ello. Todos nos equivocamos cada día. Y decidir el enfoque de cada tema, si merece ser publicado o no y su amplitud definitiva es un ejercicio complejo que no siempre es perfecto. Pero la publicación de información tendenciosa a sabiendas de su origen fraudulento es otra cosa. Y ante esta situación no se debería estar callado, porque Villarejo no hubiera logrado sus objetivos sin contar con sus cómplices periodistas», concluye.
Y es que no es para menos el nuevo medio Crónica Libre ha irrumpido publicando unos audios en los que se aprecia a Villarejo hablando con Ferreras sobre las falsas publicaciones de OkDiario de Inda a las que dio pábulo.
En ellos el periodista habla en 2016 con el expolicía sobre una información que en su día publicó Inda, atribuyéndole a Pablo Iglesias la titularidad de una cuenta falsa en el paraíso fiscal de Islas Granadinas, donde el tertuliano aseguraba que cobijaba 272.000 euros que el entonces líder de Podemos habría cobrado del Gobierno venezolano de Nicolás Maduro.
Related posts
SÍGUENOS
Thomas Sankara: el fantasma de la revolución que sigue desafiando al colonialismo francés 38 años después
Su nombre sigue siendo sinónimo de dignidad, soberanía y justicia social en África Occidental.
Pérez-Reverte, el plagio y la falsa épica de la espada
Cuando la soberbia literaria se disfraza de honor académico
Moreno Bonilla, el cáncer que no se ve
Amama planta cara al Gobierno andaluz y denuncia que las vidas de las mujeres no se curan con propaganda
Vídeo | ¿Alto el fuego?
Israel llama “tregua” a seguir matando de hambre
Vídeo | Marina Lobo en HECD: cuando la manosfera deja de escribir y empieza a matar
El feminicidio múltiple de Pablo Laurta en Argentina revela el salto mortal del odio digital a la violencia real.