El Ayuntamiento eleva una solicitud a la Dirección General de Tributos del Ministerio de Hacienda para cobrar a la Iglesia.
El Ayuntamiento de Valencia ha pedido a la Dirección General de Tributos del Ministerio de Hacienda que elabore un informe que avale el reintegro de las cantidades correspondientes a las liquidaciones del impuesto de bienes inmuebles, ya que la normativa europea considera ayudas ilegales las exenciones de los inmuebles que generan actividad económica lucrativa de titularidad de la Iglesia Católica que hayan sido objeto de declaración o reconocimiento por la corporación de algún beneficio fiscal o exención por poder constituir ayudas de Estado consideradas ilegales por la normativa europea.
«En el caso de que se avalara la recaudación del impuesto, en ningún caso se girarían recibos por edificios de culto ni tampoco por locales en los que se desarrollen actividades sin ánimo de lucro, sino solo de aquellos en los que se desarrollen actividades económicas que incurran en competencia con otras entidades públicas o privadas», matiza elDiario.es.

No es la primera vez que el Ayuntamiento trata de cobrar este tributo a los inmuebles del Arzobispado en los que se desarrollan actividades que le generan beneficios económicos.
«Por ejemplo, el hospital La Fe de València paga cada año 2 millones de euros por el impuesto de bienes inmuebles (IBI) y la Casa de la Salud, por estar vinculada a la Iglesia, está exenta del pago de 150.000 euros anuales, que es lo que le correspondería abonar», explica el rotativo.
Otro de los inmuebles por los que se remitió el recibo es el ubicado en el cruce de la avenida de Guillem de Castro con la calle de Balmes. Allí se ubica el convento de la Encarnación de las Carmelitas calzadas que data del año 1502.
«Por su condición de edificio de culto y residencial de las monjas, está exento del pago del IBI. Sin embargo, alquila sus bajos a cinco empresas y una parte importante del inmueble (bajo más plantas) al Quart Youth Hostel, por lo que los técnicos entienden que deben abonar la parte proporcional correspondiente a los bajos comerciales y a la zona del edificio dedicada a uso hotelero», sentencia el diario.
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