Los países europeos están sentando un precedente político con su silencio.
La High Court de Londres se prepara para abordar el último intento de frenar la extradición del visionario fundador de WikiLeaks, Julian Assange, a Estados Unidos. En una entrevista exclusiva con infoLibre, Stella Assange, abogada y compañera de vida de Assange, ofrece una mirada reveladora sobre el tumultuoso viaje legal y el impacto que su caso tiene en la libertad de prensa.
«Es un momento muy estresante y duro para él. Su estado de salud es precario, se encuentra tomando medicación y, además, pasa veintiuna horas al día metido en una celda de seis metros cuadrados.»
La incertidumbre se cierne sobre el destino de Assange, quien enfrenta condiciones extremas en la prisión de Belmarsh. Stella Assange, testigo de la angustia y la lucha de su esposo, destaca la difícil situación física y mental que enfrenta mientras aguarda el veredicto de los tribunales británicos.
«Sí. Si no conseguimos ganar esta ronda la decisión será definitiva y no podremos acudir a la Corte Suprema. Obviamente, no sabemos qué es lo que va a pasar, pero estamos preocupados.»
Con la última oportunidad de apelación pendiendo de un hilo, Stella Assange reconoce la gravedad de la situación. Si los tribunales británicos rechazan el recurso, la vía legal en el Reino Unido se habrá agotado, dejando al Tribunal Europeo de Derechos Humanos como la última esperanza para evitar la extradición de Assange.
«Es el caso más grave que ha existido nunca contra el periodismo. Estamos hablando de un país que dice que puede encarcelar a un periodista extranjero fuera de sus fronteras por haber publicado información, lo que puede sentar un precedente peligroso.»
La abogada denuncia la persecución sin precedentes contra Assange, destacando las implicaciones alarmantes para la libertad de prensa. Si Assange es extraditado, podría enfrentar una condena draconiana por ejercer su derecho fundamental a informar y desafiar el poder establecido.
«Absolutamente, los países europeos están sentando un precedente político con su silencio. Si los Estados europeos hicieran el cinco por ciento de lo que hacen por los presos políticos en otros lugares, no estaríamos como estamos.»
Stella Assange critica el silencio cómplice de los países europeos frente a la persecución de Assange, señalando la hipocresía de aquellos que proclaman defender los derechos humanos y la libertad de prensa mientras abandonan a uno de los suyos en su hora más oscura.
En medio de esta encrucijada legal y moral, el caso de Julian Assange trasciende las fronteras nacionales y se convierte en un símbolo de la lucha por la verdad y la justicia en un mundo donde la transparencia es escasa y la información es manipulada.
Related posts
SÍGUENOS
Las horas más bajas de Ursula
Dos bloques opuestos han coincidido en algo: pedir la cabeza de Ursula von der Leyen. Y no es una pataleta: tienen 72 firmas, el mínimo legal para forzar el debate.
Vox y la violencia que nunca quiere ver
El alcalde de Villacastín, detenido por agredir a su mujer en plena romería Otra vez Vox. Otra vez la violencia que su discurso niega mientras se enquista en sus filas. Julio César Sánchez, alcalde del partido ultra en Villacastín (Segovia), fue detenido por la Guardia…
Milei, contra las cuerdas
El peronismo conquista seis de las ocho secciones electorales y abre una grieta en el proyecto de odio del Gobierno nacional.
Vídeo | Marina Lobo: Madrid paró La Vuelta y tumbó el blanqueo de Israel
Marina Lobo lo dijo sin rodeos: lo que pasó ayer en Madrid fue histórico. Mientras el mundo miraba para otro lado, la última etapa de La Vuelta a España se detuvo en seco por las protestas masivas contra el genocidio en Gaza. Una marea ciudadana…
Vídeo | Queremos más Chikahiros
No hay pancartas masivas ni focos mediáticos. Solo un chef japonés que cada semana se planta ante la embajada de Israel en Tokio y repite lo mismo: “Parad el genodicio”. Una voz sola que vale por miles. Queremos más Chikahiros.