Dos jóvenes han sido puestos en libertad con cargos por pegar una paliza a un sintecho y grabarlo.
Dos jóvenes gallegos, vecinos de la localidad de Lalín (Pontevedra) han sido puestos en libertad después de patear a un sintecho en Gijón.
La agresión comenzaba con la patada de uno de ellos mientras le robaba la manta, jactándose de ello y mofándose de la persona.

Tras la identificación del portal la policía se ponía a investigar y este mismo fin de semana detenían a dos jóvenes. Ambos se encuentran acusados de delitos de lesiones y odio, y tras pasar a disposición judicial quedaron en libertad con cargos.
Los jóvenes, indican los medios, «son de sobra conocidos en Lalín, donde ya han protagonizado incidentes en una plaza de esta localidad».
El vídeo fue subido a Instagram de la mano de los mismos agresores, algo que se viralizó y permitió que se identificara a los agresores.
En declaraciones fuentes cercanas a los detenidos han reconocido que aquella noche habían consumido alcohol y otras drogas «en cantidades generosas».
“Vivió un episodio del cual no fue muy consciente porque había bebido y consumido. Se vio implicado en la situación de rebote. Fue una mala noche”, comentan las citadas fuentes recogidas por el Faro de Vigo.
Related posts
SÍGUENOS
Quién paga realmente tu vuelo barato
Una ganga nunca es una ganga cuando lo que se subvenciona es el colapso social, ecológico y cultural de un país entero.
El sindicato negro que doblegó al imperio
Un puñado de porters negros inició en 1925 una batalla de doce años que unió sindicalismo y emancipación racial contra el racismo y el capital.
Walmart necesita que fracase la huelga de Starbucks porque el sindicalismo les aterra a todas las grandes corporaciones
Cuando una plantilla se organiza, tiemblan Walmart, Amazon, Chevron y todo un ecosistema político-empresarial construido para aplastar derechos laborales.
Vídeo | La DANA que arrasó Valencia y la política que se escondió detrás de una mochila
Marina Lobo desmenuza el caos, las mentiras y la cadena de irresponsables
La mentira humanitaria: cómo Occidente troceó Sudán para después fingir sorpresa
Quinndy Akeju explica la historia que los titulares evitan
Seguir
Seguir
Seguir
Subscribe
Seguir