Un ecosistema mediático ultraconservador seduce a las jóvenes con discursos antifeministas disfrazados de consejos de vida y bienestar
LA NUEVA CARA DEL PATRIARCADO DIGITAL
Una red de creadoras de contenido conservadoras está construyendo una narrativa que presenta la sumisión femenina como empoderamiento a nivel internacional. Figuras como Brett Cooper, Candace Owens y medios como Evie Magazine lideran este movimiento que promueve un ideal de mujer blanca, delgada, fértil, heterosexual y políticamente alineada con la derecha más radical.
Brett Cooper, con más de 1,5 millones de suscriptores en YouTube, utiliza su plataforma para atacar el feminismo y glorificar roles tradicionales de género. En uno de sus videos más populares, afirma que «las mujeres son más felices cuando se dedican al hogar y a la familia» .
Por su parte, Evie Magazine, fundada en 2019 por Brittany Hugoboom, se presenta como una alternativa conservadora a las revistas femeninas tradicionales. Con artículos que promueven la idea de que «las mujeres deben enfocarse en ser buenas esposas y madres», la revista ha sido criticada por difundir desinformación sobre anticonceptivos y vacunas .
Este fenómeno no es aislado. Se enmarca en una estrategia más amplia de la derecha estadounidense para captar a mujeres jóvenes y alejarlas de los ideales feministas. Organizaciones como Turning Point USA han invertido millones en formar a influencers que difundan estos mensajes a través de redes sociales y podcasts .
UNA AGENDA POLÍTICA DISFRAZADA DE ESTILO DE VIDA
La womanosfera no solo promueve una estética y un estilo de vida, sino que también impulsa una agenda política regresiva. Candace Owens, por ejemplo, ha utilizado su plataforma para criticar el movimiento #MeToo y defender políticas que restringen los derechos reproductivos de las mujeres .
Alex Clark, otra figura destacada, combina consejos de bienestar con mensajes contra el feminismo y la diversidad sexual. Su programa Culture Apothecary presenta entrevistas con figuras que promueven teorías pseudocientíficas y desinformación sobre salud femenina .
Estas plataformas utilizan un lenguaje amigable y una estética cuidada para atraer a su audiencia, pero el contenido que difunden busca socavar décadas de avances en igualdad de género. Al presentar la sumisión y la dependencia económica como opciones válidas y deseables, perpetúan estereotipos dañinos y limitan las oportunidades de las mujeres.
Es crucial que las y los jóvenes reconozcan estas estrategias y cuestionen los mensajes que reciben a través de las redes sociales. La lucha por la igualdad de género no ha terminado, y la womanosfera representa un intento de revertir los logros alcanzados.
La revolución no será televisada, pero sí será tuiteada.
Related posts
1 Comment
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
SÍGUENOS
Las horas más bajas de Ursula
Dos bloques opuestos han coincidido en algo: pedir la cabeza de Ursula von der Leyen. Y no es una pataleta: tienen 72 firmas, el mínimo legal para forzar el debate.
Vox y la violencia que nunca quiere ver
El alcalde de Villacastín, detenido por agredir a su mujer en plena romería Otra vez Vox. Otra vez la violencia que su discurso niega mientras se enquista en sus filas. Julio César Sánchez, alcalde del partido ultra en Villacastín (Segovia), fue detenido por la Guardia…
Milei, contra las cuerdas
El peronismo conquista seis de las ocho secciones electorales y abre una grieta en el proyecto de odio del Gobierno nacional.
Vídeo | Marina Lobo: Madrid paró La Vuelta y tumbó el blanqueo de Israel
Marina Lobo lo dijo sin rodeos: lo que pasó ayer en Madrid fue histórico. Mientras el mundo miraba para otro lado, la última etapa de La Vuelta a España se detuvo en seco por las protestas masivas contra el genocidio en Gaza. Una marea ciudadana…
Vídeo | Queremos más Chikahiros
No hay pancartas masivas ni focos mediáticos. Solo un chef japonés que cada semana se planta ante la embajada de Israel en Tokio y repite lo mismo: “Parad el genodicio”. Una voz sola que vale por miles. Queremos más Chikahiros.
Goebbles,tiene contnuidad.