La Federación de Estados Unidos anuncia que ambas compartirán los ingresos que obtengan por su participación en los mundiales.
Como ocurre en todo el mundo los futbolistas de la selección masculina de fútbol de Estados Unidos ganaban más dinero por clasificarse para el mundial que las futbolistas femeninas por ganarlo, pero se ha llegado a un histórico acuerdo para remediarlo.
La Federación de Fútbol estadounidense ha anunciado este miércoles sendos acuerdos laborales con las asociaciones de futbolistas de uno y otro sexo que implican que las selecciones masculina y femenina cobrarán lo mismo.

El convenio al respecto recoge el reparto igualitario de ingresos por participación en partidos amistosos, competiciones oficiales, derechos televisivos, patrocinios y venta de entradas.
El acuerdo se ha llevado a cabo después de la amenaza de demanda por discriminación salarial y tras seis años de protestas. Para la Federación, mantener ese litigio abierto dañaba su imagen y ponía en riesgo patrocinios con ingresos multimillonarios.
La Federación de Fútbol estadounidense está presidida por una mujer, exfutbolista y entrenadora, Cindy Parlow Cone, que ha impulsado el pacto.
“Este es un momento verdaderamente histórico. Estos acuerdos han cambiado el deporte para siempre aquí en Estados Unidos y tienen el potencial de cambiarlo en todo el mundo”, ha dicho Cone al anunciar el acuerdo a través de un comunicado en el que se ha declarado “agradecida” a las dos selecciones y “orgullosa” del convenio alcanzado.
Para lograr el acuerdo con los futbolistas de la selección masculina sin que estos vieran caer su retribución y se opusieran, la Federación aumenta el dinero que destina a pagar a los deportistas. Lo que logren de premios e ingresos por su participación en el mundial la selección masculina y femenina, con independencia de su clasificación, se pondrá en común y de esa cifra el 10% irá a la Federación y el 90% a los futbolistas de ambas selecciones de forma igualitaria. En los mundiales de 2026 y 2027, la Federación se quedará el 20% y los deportistas, el 80%.
Si solo una de las dos selecciones participa en un torneo, se llevará el 70% de los ingresos y el 30% restante irá a la Federación. Si ambas participan, como por ejemplo en la Copa Oro, de la Concacaf, de nuevo se pondrán los ingresos en común y hombres y mujeres se repartirán por partes iguales el 70%, mientras que el otro 30% irá a la Federación.
Related posts
Trump aún no controla la justicia
Hoy, la justicia ha defendido el Estado de derecho. No por ideología. No por valentía. Sino porque todavía hay quien entiende que las leyes están para algo más que adornar discursos.
La ultraderecha gana terreno entre banderas ajenas
Chega se convierte en la segunda fuerza en Portugal gracias al voto emigrante. El fascismo posmoderno se viste de desarraigo y antipolítica para colarse por la puerta de atrás del Parlamento.
Opinión | ¿Y ahora qué, Alemania?
Las promesas de “nunca más” frente al genocidio en Gaza
Maternidad o barbarie
La libertad de no ser madre no debería escandalizar a nadie en 2025. Y sin embargo…
Vídeo | Hasbara: blanqueando el genocidio
Mientras bombardea Gaza, el Estado israelí despliega una campaña global de imagen financiada con dinero público, desde los escenarios hasta los algoritmos