Los datos sugieren una estructura de mercado que favorece considerablemente a los intermediarios y a las grandes cadenas de supermercados como Mercadona o Carrefour
El índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) de enero de 2024 pone en evidencia una realidad alarmante y predadora de las grandes cadenas de supermercados como Mercadona o Carrefour. Las cifras son más que una simple estadística; son un testimonio de la explotación desenfrenada de los agricultores por parte de estos gigantes minoristas.
Esta es la diferencia entre lo que Mercadona o Carrefour le pagan a los Agricultores y el precio que nos pone a nosotros. Ahí está el enemigo. De esto tiene que hablar la izquierda. Abajo-Arriba. pic.twitter.com/2SnCZQtuqN
— Jose Ignacio García ۞ ?? (@joseigs_) February 7, 2024
Por ejemplo, productos básicos como las patatas y los limones muestran diferencias de precio de 472% y 880% respectivamente. Esto significa que los consumidores están pagando hasta más de cinco veces lo que el agricultor recibe originalmente. El IPOD agrícola promedio en este informe es de 4.17, lo que sugiere que, en promedio, los precios se multiplican por más de cuatro veces desde el origen hasta el destino.
El IPOD general, que incluye tanto los productos agrícolas como ganaderos, se sitúa en 3.92. Específicamente, en el sector ganadero, destacan productos como la ternera y el cordero con incrementos de 286% y 310% respectivamente.
Estas cifras denotan una estructura de mercado que favorece únicamente a los intermediarios y a las grandes cadenas de supermercados, en detrimento de los agricultores y consumidores. El Gobierno debe utilizar esta información para abogar por una cadena de suministro más justa, que permita a los agricultores obtener precios más equitativos por sus productos y a los consumidores pagar precios más razonables.
El llamado es claro: la necesidad de políticas que aborden esta desigualdad, apoyando a los productores locales y buscando formas de reducir el poder de mercado de los grandes actores de la cadena de suministro, podría ser un tema central de las plataformas de izquierda, enfocándose en la lucha de clases desde la perspectiva de la economía agraria.
El objetivo es simple: buscar un sistema más equitativo que beneficie tanto a los que producen la comida como a los que la consumen.
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