Suso Vaamonde es considerado el primer preso político de la restablecida democracia española
El MC Pablo Hasél fue condenado a dos años de prisión por enaltecimiento del terrorismo en 2014 por enaltecimiento del terrorismo por el contenido de las letras de sus canciones. Subió a la red social YouTube diez canciones compuestas por él mismo en las que ensalzaba las organizaciones de Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO), Facción del Ejército Rojo (RAF) y Terra Lliure, e incluso pedía a estas organizaciones que volvieran. Algo que en una democracia normal se enmarcaría dentro de la libertad de expresión.
En marzo de 2017, la fiscalía solicitó contra él cinco años más de condena, que se sumarían a los dos que ya tiene, por delitos de «enaltecimiento del terrorismo», «calumnias e injurias contra la corona» y «calumnias e injurias contra las instituciones del Estado». Fue finalmente condenado el 2 de marzo de 2018 a una pena de dos años y un día de prisión, más una multa de 24.300 euros. La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional lo consideró culpable de los delitos de enaltecimiento del terrorismo e injurias a las Corona e instituciones por sus comentarios e insultos en las redes sociales.
Y hace solo unos días, el 28 de enero de 2021, la Administración de Justicia dio a Hasél 10 días para entrar en prisión voluntariamente, a través de una notificación a su abogado. El 2 de febrero se lo notificaron al artista. El rapero se niega al ingreso voluntario ante la situación de represión e injusticia.
Suso Vaamonde, 40 años antes de Hásel
Suso Vaamonde fue un cantautor gallego nacido en la localidad de Pontecaldelas en los 50 y que falleció en el año 2000. Fue compositor desde los dieciséis años y entró desde joven en contacto con la cultura roquera en Vigo, lo que lo llevó a formar parte de los grupos musicales Os Copens y Marco Balorento, este último hacia 1966. De ahí pasa al movimiento Voces Ceibes a principios de la década de 1970, dejando un poco de lado su labor de letrista para, acompañado de su inseparable guitarra, poner voz y música a los poemas gallegos.
Su trabajo de cantautor giró sobre un triple pensamiento: defensa de un pueblo, de una tierra y de una lengua. Así, en junio de 1979, dio en la pontevedresa plaza de la Ferreiría en un recital antinuclear. Allí, dejándose llevar por el fervor del directo, decidió añadir una estrofa más al popular «Uah!», que rezaba así:
Cando me falan de España (Cuándo me hablan de España)
sempre teño unha disputa (siempre tengo una disputa)
que se España é miña mai (que si España es mi madre)
eu son un fillo de puta. (yo soy un hijo de puta.)
Estas manifestaciones fueron consideradas «injurias a la Patria con publicidad» y fue condenado, 40 años antes que Hásel, en noviembre de 1980, a seis años y un día de prisión. Suso Vaamonde optó por exiliarse, viajando por Londres y Alemania, estableciéndose finalmente en la capital venezolana, Caracas.
En 1984 decidió volver y entregarse, esperando que el nuevo gobierno socialista revisase las condenas derivadas de viejos rencores e injusticias del régimen anterior. Después de 46 días en la cárcel de Ourense, lo que le llevó a ser considerado el primer preso político de la restablecida democracia española, un indulto lo liberó definitivamente. Una vez indultado, ofreció un recital en la cárcel orensana donde había estado recluido.
La «persona más representativa en la historia de la música de nuestro país», en palabras del poeta Manuel María, murió el 16 de febrero de 2000, en la Clínica Fátima de Vigo.
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