Preguntada acerca de si quiere llegar a ser presidenta, Díaz responde con un «no» rotundo.
Si no sale adelante su proyecto de país tras el «proceso de escucha», Yolanda Díaz abandonará la política. Así lo afirma la vicepresidenta y ministra de Trabajo en una entrevista publicada este sábado en ‘Yo Dona‘, en la que la vicepresidenta segunda habla abiertamente sobre su proyecto político.
Preguntada acerca de si quiere llegar a ser presidenta, Díaz responde con un «no» rotundo. «No quería ser ministra ni vicepresidenta, y al final lo fui», señala la entrevistada, quien agrega: «Si me fuera a presentar a las elecciones y tuviera esa vocación, lo diría públicamente, porque la ciudadanía tiene derecho a saberlo».
Díaz ha reconocido a la revista tener «miedo» por no superar las expectativas depositadas en ella y las dificultades que implica no tener una formación política detrás. «Soy un ser humano muy pequeñito y no tengo partido», ha señalado, pero ha añadido que su perfil político le permite «estar en la mesa del diálogo social, discutiendo sin dormir y cediendo como cede todo el mundo», porque le «apasiona», pero que relativiza bastante el resto de las cosas.

Sobre la plataforma que está impulsando, ha vuelto a insistir en que no va de nombres, subryando que lo importante es qué van hacer. «Lo que quiere la sociedad española es que avancemos más allá de las fronteras ideológicas en temas clave como el cambio del modelo productivo, la economía circular, el cambio climático», ha afirmado, al tiempo que ha recordado que «la buena política es que nos entendamos aunque pensemos distinto».
Además, Díaz reconoce sentirse «desbordada» ante el entusiasmo despertado por el acto ‘Otras Políticas’, celebrado hace unas semanas en Valencia. «Aún estoy impactada, incluso intranquila por lo que vi allí», admite, señalando que «todo eso es presión» y «responsabilidad».
«No quiero distraerme. Cuando lleguen las elecciones ya veremos», ha añadido, reconociendo que es «muy difícil hacer las cosas sin partido». «Se pone siempre el foco en los partidos, y a veces son un obstáculo brutal».
Díaz ha afirmado que ahora está «un proceso de escucha» que no sabe cómo acabará. «Si no sale, me voy a mi casa, a mi profesión, y bienvenida sea», ha zanjado.
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