Es lamentable ver cómo estos hipócritas se quejan de los impuestos que pagan los empresarios, pero no dudan en crear sus propias empresas para evadirlos.
Herrera, el señorito andaluz de la radio, nos contaba sus historias de patriotismo rancio con su tono prepotente mientras trazaba artimañas para pagar menos impuestos a su querida España. Utilizando una “sociedad pantalla”, se benefició del Impuesto de Sociedades, pagando solo un 30% en lugar del 45% que le correspondía según el IRPF. Patriotismo de pacotilla.
Mientras ingresaba millones de euros a través de su empresa La Rehos SL, solo se quedaba con un pequeño porcentaje, el resto se desviaba a otras tres sociedades también propiedad suya. Es lamentable ver cómo estos hipócritas se quejan de los impuestos que pagan los empresarios, pero no dudan en crear sus propias empresas para evadirlos.
Somalia ha tenido suerte de no tenerle como vecino después de que se tragara sus palabras y no cumpliese sus amenazas de exiliarse. Mientras tanto, España sigue sufriendo las consecuencias de la hipocresía de estos supuestos patriotas de pulsera. Ellos se llenan los bolsillos mientras el resto pagamos la cuenta.
Los líderes ultra que quieren ser la voz de Trump en Europa: el listado que nadie pidió
Líderes de la extrema derecha y pragmáticos se disputan el puesto de interlocutor privilegiado con el expresidente estadounidense
Así se lamen bien las botas del poder: Zuckerberg se arrodilla ante Trump por 25 millones
Mark Zuckerberg ha abandonado cualquier pretensión de neutralidad para alinear su imperio digital con la agenda trumpista.
Opinión | El gran error de estrategia de Feijóo que pagará caro: así se fabrican votantes de ultraderecha
Nada en su discurso responde a la realidad; todo se reduce a crear indignación prefabricada para movilizar (mal) a su electorado. Javier F. Ferrero La política española lleva años atrapada en una burbuja mediática que no representa al país real, sino a los intereses de…
“EL CLIENTE ES UN MONSTRUO” 🤫 Lo que no te contarán en Tele5 sobre Mercadona
Si la imagen de Mercadona es tan buena, ¿por qué cada vez más empleados denuncian prácticas abusivas? Y lo más importante, ¿por qué los grandes medios no lo cuentan?