25 Abr 2024
DESTACADA, INTERNACIONAL

Ultras de EEUU y Hungría: de dónde viene el latido fetal y las ecografías en 4D 

Recientemente ha quedado patente que para Vox cree que la forma de reducir el número de abortos es limitando los derechos de las mujeres.

Recientemente la Junta de Castilla y León ha causado preocupación a nivel internacional al proponer un retroceso sin precedentes en los derechos reproductivos, al exponer como viable la medida de escuchar el latido fetal o acceder a una ecografía 4D para disuadir a las mujeres que desean abortar.

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No obstante, en la región se encontraron con las reticencias de sus aliados conservadores, quienes afirman que no es una medida obligatoria sino voluntaria para mujeres y profesionales. Sin embargo, esta propuesta demuestra la obstinada lucha de Vox contra los derechos reproductivos de las mujeres.

Cabe recordar que el vicepresidente de Vox, Juan García-Gallardo, anunció la medida como voluntaria para las mujeres y obligatoria para los profesionales, pero el consejero de Presidencia, Jesús Julio Carnero del Partido Popular, aclaró que se ofrecerán estos servicios «con total voluntariedad y libertad».

Desde InfoLibre explican que la propuesta forma parte de la ideología de Vox y toma como referencia las leyes antiabortistas en algunos estados de EE.UU. En 2019, estados como Alabama, Georgia, Kentucky, Louisiana, Ohio, Missouri y Mississippi, que aprobaron leyes que restringen el derecho al aborto basándose en la actividad cardíaca del embrión a partir de la sexta semana de embarazo.

En 2021, también en Texas se aprobó una de las leyes más drásticas sin excepciones en casos de violación o incesto. Aunque, activistas feministas en EE.UU. y expertos en salud advierten sobre la inexactitud de hablar de latido fetal a las seis semanas, ya que desde un punto de vista médico, el embrión todavía no ha desarrollado un corazón completo a esa edad.

«En Estados Unidos, las activistas feministas insisten, apoyándose en las explicaciones de los profesionales de la salud, en advertir de lo inexacto que supone hablar de latido fetal a las seis semanas. Desde el punto de vista médico, subrayan, el embrión todavía no ha desarrollado el corazón tal y como lo conocemos a las seis semanas de gestación», exponen desde el medio.

Como bien se exponía en Spanish Revolution, estas medidas también son eco de las medidas impuestas por Viktor Orban en Hungría.