23 Dic 2024
DESTACADA, POLÍTICA ESTATAL

Las constructoras de Florentino Pérez o Villar-Mir amañaron concursos mientras gobernaba el PP 

El importe total de las adjudicaciones a estas empresas superó los 530 millones de euros

La ACS de Florentino, la OHL de Juan Villar-Mir, la Ferrovial de Rafael del Pino o Sacyr, la grandes empresas constructoras del país, se repartieron los contratos de carreteras durante la época en la que gobernaba Mariano Rajoy con el Partido Popular.

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha sancionado con un total de 61,3 millones de euros a un 12 empresas, entre las que se encuentran las citadas anteriormente. Considera el CNMC que se ha cometido una infracción por la alteración de las licitaciones de servicios de conservación y explotación de carreteras convocadas por el Ministerio de Fomento desde 2014 a 2018.

La sanción más abultada corresponde a API (ACS), con 11,78 millones de euros. La filial de FCC, Matinsa, ha sido multada con 8,5 millones, mientras que Ferroser (Ferrovial) ha sido sancionada con 5,7 millones de euros. La multa a la filial de Sacyr alcanza los 5,17 millones, mientras que Elsan (OHL) ha sido sancionada con 3 millones de euros; Acciona Mantenimiento con 2,33 millones, y Audeca (Elecnor), con 2,6 millones.

Según la CNMC, las empresas sancionadas participaban sistemáticamente en todas las licitaciones acordadas, restringiendo el número de ofertas con bajas superiores a un umbral predeterminado por el cártel que podían presentar.

Competencia subraya que la “especial complejidad y nocividad del cártel” para el interés general han sido consideradas a título de agravante a la hora de establecer el importe de las multas.

Competencia ha subrayado que se trata de una infracción muy grave prohibida por el artículo 1 de la Ley de Defensa de la Competencia y el 101 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea y ha sancionado además a estas empresas con la prohibición de contratar con las administraciones públicas.

Acuerdo inminente. Casemiro y Modric se despiden de él. Florentino Pérez  acepta venderlo por orden de Ancelotti

Se repartieron 71 licitaciones de 101

Todas las empresas sancionadas por formar parte de este cártel son: Acciona Mantenimiento y solidariamente su matriz Acciona; Aceinsa; Alvac; API y solidariamente su matriz ACS; Audeca y solidariamente su matriz Elecnor; Copasa; Elsamex; Elsan y solidariamente su matriz OHL; Ferroser y solidariamente su matriz Ferrovial; Innovia y solidariamente su matriz Copcisa; Matinsa y solidariamente su matriz FCC, y Sacyr Conservación y solidariamente su matriz Sacyr.

La CNMC ha podido acreditar que este cártel de empresas operó entre febrero de 2014 y diciembre de 2018, aunque deja claro que existen conversaciones desde 2009. Las empresas participantes se adjudicaron 71 licitaciones de un total de 101 que sacó el Ministerio de Fomento relacionadas con la prestación de servicios de conservación y explotación de la Red de Carreteras del Estado.

El importe total de las adjudicaciones a empresas de este grupo superó los 530 millones de euros: el 63% del importe total adjudicado por el Ministerio para los servicios de conservación de las Red de Carreteras del Estado.

Los Villar Mir piden un rescate de 300 M a la SEPI tras quedarse sin acceso  a la banca

Funcionamiento

Para llevar a cabo sus planes, estas empresas se reunían “para tomar café” donde las empresas que formaban parte del mismo ajustaban sus criterios de coordinación de las ofertas económicas a presentar.

Las empresas agrupaban las licitaciones en grupos para los que se acordaban unos criterios comunes de presentación de ofertas económicas, con una “bolsa” de puntos para cada grupo de licitaciones que se iban consumiendo por las empresas en función del nivel de descuentos sobre el presupuesto de contratación. Cuanto más bajas fueran las ofertas, más puntos se gastaban.

“De este modo se limitaba el número de contratos en los que las empresas presentaban descuentos altos en cada grupo de licitaciones, ya que el número de puntos de la bolsa nunca era suficiente como para tratar de conseguir todos los contratos de cada grupo. Este sistema incentivaba a cada empresa del cártel a concentrar sus posibilidades de adjudicación en un número limitado de licitaciones, presentando en las restantes, ofertas con escasas o nulas posibilidades de adjudicación, convirtiéndose así en ofertas de cobertura”, explica la CNMC.