The Guardian se ha hecho eco de la precaria situación de vida en Estados Unidos.
Pese a la riqueza que posee Estados Unidos, que actualmente se encuentra en la segunda posición con carácter global y la economía más grande al considerarse el PIB como medida, pero la ONU acaba de degradar al país al puesto 41 en una clasificación global basada en sus objetivos de desarrollo sostenible.
En The Guardian resumen que esta clasificación se centra “esencialmente en la calidad de vida de la gente común”.
De este modo Estados Unidos se sitúa justo en el escaño inferior a Cuba.

El medio británico lanza diversas cuestiones que ponen de manifiesto el razonamiento de este abrupto descenso: “Casi 1 de cada 10 adultos tiene deudas médicas y un hueso roto puede llevarte a la bancarrota”. “Un país donde una ciudad de más de 160,000 residentes recientemente no tuvo agua potable durante semanas”. “Un país donde la esperanza de vida ha caído por segundo año consecutivo y la gente pobre vende su plasma sanguíneo para llegar a fin de mes”.
Desde The Guardian, no obstante, lanzan también una advertencia a al otro lado del atlántico, ya que países como Reino Unido “deberían calificarse como países pobres” al advertir una extensa desigualdad social en cuanto a ingresos en los habitantes, lo que expone una pobreza extrema manifiesta para una gran porcentaje social, acrecentado por una inflación desbocada.
También ponen en constancia las problemáticas de regiones de Eslovenia o Polonia.
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