El grupo para el que trabaja Micaela Núñez Feijóo se hizo con adjudicaciones en las que no era la mejor oferta económica.
Los expediente de adjudicación de decenas de contratos de la administración gallega con el Grupo Eulen apuntan a que la compañía tuvo trato de favor con respecto a sus competidores en numerosos procedimientos, según ha documentado Público.
La directora del grupo para el Noroeste de España es Micaela Núñez Feijóo, hermana menor del presidente de la Xunta, que multiplicó los contratos con la Xunta desde que Feijóo llegó al Gobierno en el 2009.

Desde entonces hasta finales del 2021 recibió adjudicaciones por valor de 37 millones de euros, casi 3 millones al año. Es decir, el triple de la media de lo que contrataba con el Ejecutivo bipartito PSOE-BNG de Emilio Pérez Touriño entre el 2005 y el 2009.
«Del análisis de los cerca de 140 contratos adjudicados por la Xunta a las filiales del grupo desde el 2009 que figuran en la plataforma de Contratos Públicos de Galicia, se puede deducir que obtuvo trato de favor en muchos de ellos», indican desde el medio.
Ya que consideran que «Eulen se lleva adjudicaciones en las que no era la mejor oferta económica, incluso siendo la más cara en algunas; ganando procedimientos por exclusión de sus competidoras sin que aparezcan explicaciones en el expediente o incluso cuando presenta una oferta considerada como temeraria, es decir anormalmente baja y que podría poner en riesgo la correcta prestación del servicio o basarse en salarios desproporcionadamente bajos del personal de la empresa contratista».
Existen diversos contratos, siendo el más cuantioso adjudicado hasta la fecha por la Xunta al Grupo Eulen el referido a los servicios de vigilancia y seguridad de cinco hospitales y veinticinco centros de salud del área sanitaria de A Coruña. El precio de licitación asignado por el Servicio Galego de Saúde (Sergas) fue de 4,7 millones, IVA incluido, para un período de dos años.
Related posts
SÍGUENOS
Quién paga realmente tu vuelo barato
Una ganga nunca es una ganga cuando lo que se subvenciona es el colapso social, ecológico y cultural de un país entero.
El sindicato negro que doblegó al imperio
Un puñado de porters negros inició en 1925 una batalla de doce años que unió sindicalismo y emancipación racial contra el racismo y el capital.
Walmart necesita que fracase la huelga de Starbucks porque el sindicalismo les aterra a todas las grandes corporaciones
Cuando una plantilla se organiza, tiemblan Walmart, Amazon, Chevron y todo un ecosistema político-empresarial construido para aplastar derechos laborales.
Vídeo | La DANA que arrasó Valencia y la política que se escondió detrás de una mochila
Marina Lobo desmenuza el caos, las mentiras y la cadena de irresponsables
La mentira humanitaria: cómo Occidente troceó Sudán para después fingir sorpresa
Quinndy Akeju explica la historia que los titulares evitan
Seguir
Seguir
Seguir
Subscribe
Seguir