«Todo es menudeo. Poca cosa. Cantidades pequeñas de dinero. Pero multiplicadas por el número de empresas que nos lo hacen y el número de veces al año que sufrimos esos cargos, se convierte en algo más grande.»
Por Rubén Sánchez
¿Te has parado a pensar en las pequeñas cantidades de dinero que te dejas robar cada año por parte de empresas que cuelan conceptos de forma ilegal en sus recibos?
Echa un vistazo al último cargo por el seguro de tu vivienda o de tu vehículo. Y ahora mira cuánto te cobraron el año pasado. Te han subido, no sé… ¿10, 15, 20 euros? ¿Y no te avisaron con los dos meses de antelación que establece la ley?
Ahora mira tus últimas facturas de la luz. ¿En alguna de ellas te han hecho una lectura estimada? Eso significa que la distribuidora eléctrica no leyó lo que marcaba tu contador y te han cobrado, en teoría, el mismo consumo que tuviste el año pasado en las mismas fechas. Es legal, pero tienes derecho a que te devuelvan la cuota por el alquiler del contador. Una cuota que incluye su lectura mensual. Son solo 91 céntimos. Pero son tus 91 céntimos.
Por cierto, ¿tú revisas cada mes el recibo de tu móvil? Igual te cuelan 1 euros por un antivirus que nunca pediste. O te han dado de alta sin tu consentimiento en algún servicio de terceros. Una plataforma de videojuegos, por ejemplo.
Pero no se trata de que reclames que dejen de cobrarte por eso, sino que además te devuelvan todo lo que te han cargado hasta ahora, da igual que lleven haciéndolo tres meses o tres años.
Y otra cosa. ¿Has hecho un portabilidad de tu fibra, fijo y móvil o móviles a otra compañía? ¿Estás seguro de que le has facilitado a la teleco a la que te vas todas las numeraciones que tienes? Resulta que hay operadoras que te regalan una línea móvil extra, una línea gratis con pocos gigas de datos, una línea que buena parte de la gente nunca usa. De hecho, es una línea que muchísima gente ni siquiera sabe que tiene. Y claro, cuando hace la portabilidad, no cae en que tiene que pedir a su compañía la baja de ese número, porque si no, empezarán a cobrársela en cuanto haya migrado el resto de servicios a su nuevo operadora.
Todo es menudeo. Poca cosa. Cantidades pequeñas de dinero. Pero multiplicadas por el número de empresas que nos lo hacen y el número de veces al año que sufrimos esos cargos, se convierte en algo más grande. Y ni que decir tiene de la cifra que sale por los millones de víctimas de microfraudes o de sus propios descuidos por no estar atentos a sus facturas.
En nuestras manos está dejar o no que nos sigan robando.
Soy Rubén Sánchez y en ocasiones veo fraudes.
—
Editorial del episodio 70 del pódcast En Ocasiones Veo Fraudes.
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