No se trata sólo de buscar justicia para Samuel, sino también de enfrentar y erradicar la homofobia
El reloj marcaba el inicio de otro 3 de julio, el segundo desde la trágica noche en que Samuel Luiz perdió la vida en A Coruña. Dos años han pasado, y su crimen sigue siendo una herida abierta en la sociedad española, no sólo por la brutalidad del ataque, sino también por la sombra de duda que aún se cierne sobre él: ¿fue un acto de homofobia? Pronto lo sabremos
La fría madrugada que vio el fin de Samuel en la avenida de Buenos Aires frente a la playa de Riazor todavía resuena en nuestros oídos. Un grupo de jóvenes golpeó a este hombre de 24 años hasta la muerte, un hecho que sólo pudo ser recopilado mediante los testimonios de esa noche, la revisión de los teléfonos móviles de los acusados y las cámaras de seguridad. La justicia aún no ha encontrado su camino hacia todos los responsables, con cinco adultos, de los cuales tres permanecen tras las rejas, aún a la espera de ser acusados por la Fiscalía. Los dos menores implicados ya han recibido su condena.
Sin embargo, mientras los sospechosos restantes aguardan su día en el tribunal, una cuestión de suma importancia se plantea con respecto al carácter del crimen. ¿Fue Samuel víctima de un delito de odio? ¿Fue su asesinato un acto de homofobia? Algunos indicios en la investigación sugieren que sí, que ciertos comentarios hechos por los acusados muestran un odio hacia los homosexuales. Pero todavía falta la última palabra.
Este hecho, sin resolverse, ha convertido a Samuel en una figura emblemática de la lucha LGTBI+, con vigilias y homenajes que se llevan a cabo en su honor. Pero en medio de los recordatorios de su vida y el dolor de su pérdida, hay una sed de justicia, de respuestas. Respuestas que sólo pueden llegar cuando se aclare definitivamente si su asesinato fue un acto de odio.
En este momento, se nos pide paciencia mientras se concluye la fase de instrucción. Mientras tanto, cada declaración de los investigados, cada testimonio y cada informe policial es examinado con detenimiento. Los presuntos asesinos de Samuel Luiz están cada vez más cerca de enfrentarse a un jurado popular. No obstante, para la sociedad española, y especialmente para la comunidad LGTBI+, la espera parece interminable.
Así, con el corazón pesado, marcamos otro aniversario del asesinato de Samuel Luiz, todavía esperando que se haga justicia. La sociedad española no descansará hasta que se responda esa pregunta esencial: ¿Fue este un crimen de odio contra los homosexuales? Porque no se trata sólo de buscar justicia para Samuel, sino también de enfrentar y erradicar la homofobia que aún pervive en nuestra sociedad.
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