«La gente de la cultura no podemos ir a El Hormiguero», denuncia la actriz
La popular actriz Mónica López, conocida por su papel en la serie ‘Rapa’ de Movistar+, ha expresado su dura postura contra ‘El Hormiguero’ y su anfitrión, Pablo Motos, durante una reciente aparición en el programa ‘La Caravana’ de la estación de radio Ràdio Estel. Sus comentarios son un ejemplo de la persistente discordia entre la industria del entretenimiento y las convicciones éticas y políticas personales.
Mientras está en la gira de promoción de su serie, López explicó por qué decidió no acompañar a su coprotagonista Javier Cámara a una reciente aparición en el popular programa nocturno de Antena 3. En sus palabras, López criticó a ‘El Hormiguero’ y a Motos, acusándolos de blanquear al fascismo y facilitar discursos a figuras polémicas. «Los profesionales de la cultura no deberíamos pisar ‘El Hormiguero'», argumentó, continuando: «no se tiene que ir a El Hormiguero. Ese señor blanquea el fascismo y blanquea a gente impresentable. La gente de la cultura no podemos ir a El Hormiguero«, señaló López.
ENTREVISTA | ?️ "No s'ha d'anar a @El_Hormiguero"
— La Caravana (@lacaravanaestel) June 21, 2023
L'actriu Mónica López explica que es va negar a anar-hi perquè creu que el presentador del programa, Pablo Motos, blanqueja el feixisme. ⬇️
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Esta postura valiente no estuvo exenta de conflictos, ya que Mónica López admitió tener fuertes desacuerdos con los productores por su rechazo a aparecer en el programa. Cámara, por su parte, intentó razonar con ella alegando la enorme visibilidad que proporciona ‘El Hormiguero’, con su audiencia de millones. Sin embargo, la firme creencia de López en la integridad y la ética la llevó a resistir, alegando que preferiría un «producto de calidad que tal vez tenga una audiencia más pequeña» a comprometer sus principios.
Ese señor blanquea el fascismo
A medida que la conversación continuó, López defendió su posición con una feroz convicción que incluso la llevó a disculparse por su exaltación. «Lo veo tan claramente, y todos a mi alrededor me miran como si estuviera fuera de lugar. Pero no estoy equivocada, no deberíamos asistir a estos lugares», sostuvo.
El presentador de radio apoyó su postura, añadiendo que él también boicotearía ‘El Hormiguero’ hasta que dejara de acoger a figuras como Santiago Abascal. López, en un tono concluyente, admitió que nunca ve el programa.
Esta controversia pone de relieve el delicado equilibrio que deben mantener los profesionales de la cultura y los medios entre la promoción de su trabajo y la defensa de sus creencias y valores. Para Mónica López, parece que su ética y sus convicciones políticas son prioridades que no está dispuesta a sacrificar en aras de la exposición mediática.
La crítica de López a ‘El Hormiguero’ y a Pablo Motos no solo cuestiona la dirección y las decisiones del programa, sino que también sirve como un llamado a la reflexión sobre la responsabilidad de los medios de comunicación y la industria del entretenimiento en su conjunto.
¿Dónde deberíamos trazar la línea entre la visibilidad y la promoción de los valores que defendemos?
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