Si tienes dinero puedes comprar cualquier cosa, hasta a la ONU: Arabia y los derechos de las mujeres
El mismo país que ocupó en 2023 el puesto 131 de 146 en brecha mundial de género, será el encargado de representar los derechos de las mujeres.
Si tienes dinero puedes comprar cualquier cosa. Sí, incluso a la ONU. Y para ejemplo tenemos la reciente designación de Arabia Saudí para presidir un organismo de la Organización de Naciones Unidas dedicado a los derechos de la mujer. Exacto, el mismo país que ocupó en 2023 el puesto 131 de 146 en brecha mundial de género, será el encargado de representar los derechos de las mujeres.
Arabia Saudí continúa con su campaña internacional de lavado de imagen pagada a golpe de talonario. Lo vemos con el deporte, con el cambio climático, los medios de comunicación y ahora hasta con el feminismo. Y es que en un mundo capitalista todo se puede comprar, desde las personas hasta los valores y los derechos.
Related posts
SÍGUENOS
Las horas más bajas de Ursula
Dos bloques opuestos han coincidido en algo: pedir la cabeza de Ursula von der Leyen. Y no es una pataleta: tienen 72 firmas, el mínimo legal para forzar el debate.
Vox y la violencia que nunca quiere ver
El alcalde de Villacastín, detenido por agredir a su mujer en plena romería Otra vez Vox. Otra vez la violencia que su discurso niega mientras se enquista en sus filas. Julio César Sánchez, alcalde del partido ultra en Villacastín (Segovia), fue detenido por la Guardia…
Milei, contra las cuerdas
El peronismo conquista seis de las ocho secciones electorales y abre una grieta en el proyecto de odio del Gobierno nacional.
Vídeo | Marina Lobo: Madrid paró La Vuelta y tumbó el blanqueo de Israel
Marina Lobo lo dijo sin rodeos: lo que pasó ayer en Madrid fue histórico. Mientras el mundo miraba para otro lado, la última etapa de La Vuelta a España se detuvo en seco por las protestas masivas contra el genocidio en Gaza. Una marea ciudadana…
Vídeo | Queremos más Chikahiros
No hay pancartas masivas ni focos mediáticos. Solo un chef japonés que cada semana se planta ante la embajada de Israel en Tokio y repite lo mismo: “Parad el genodicio”. Una voz sola que vale por miles. Queremos más Chikahiros.