Los dos jóvenes, que carecían de papeles, actuaron a pesar de que eran los que más tenían que perder, dado que no tenían regularizada su situación en España.
Este jueves, el Pleno del Ayuntamiento de A Coruña ha aprobado por unanimidad una moción del BNG para concederles a Ibrahima Diack y Magatte Ndyae, los dos senegaleses que socorrieron a Samuel Luiz de la paliza homófoba que le costó la vida el pasado 3 de julio, el título de hijos adoptivos de la ciudad.
Francisco Jorquera, portavoz del BNG, señaló que los dos jóvenes, que carecían de papeles, actuaron a pesar de que «eran los que más tenían que perder, dado que no tenían regularizada su situación en España».
Además, Jorquera subrayó que “la violencia, el ensañamiento y la homofobia” que, a su juicio, tuvieron lugar en el crimen de Samuel Luiz crearon una gran conmoción y no representan a la ciudad coruñesa.
“Lo que sí nos representa es el comportamiento de Ibrahima y Magatte, ya que auxiliaron a Samuel hasta el final, intentando frenar la agresión”, añadió. Isabel Faraldo, concejala no adscrita de Podemos, también recalcó que fueron los únicos que intentaron evitar la agresión.

Por otra parte tal y como recoge La Voz de Galicia, el edil de la Marea, Alberto Lema, contrapuso la conducta de Ibrahima y Magatte con los discursos «racistas» de la ultraderecha.
Ibrahima y Magatte recibieron el 27 de julio las tarjetas de residencia y de trabajo
El concejal popular Roberto Coira destacó la «lección de humildad y valor» que han dado los dos jóvenes y finalmente, la concejala de Servicios Sociales, Yoya Neira, también destacó que «pese a ser los que más tenían que perder, fueron los únicos que intervinieron para intentar salvar la vida a un ser humano». Neira destacó también que «compartir ciudadanía con ellos» es un honor y recordó el ejemplo de integración que es la comunidad senegalesa de A Coruña.
Tal y como confirmaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno en A Coruña, Ibrahima y Magatte recibieron 20 días más tarde de su acto altruista, el 27 de julio, las tarjetas de residencia y de trabajo tras concluir el proceso de regularización de su situación en España.
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