El diputado de Compromís ha dedicado dos rotundos calificativos a la formación de Santiago Abascal recurriendo al Evangelio
Este miércoles se ha celebrado una nueva sesión plenaria en el Congreso de los Diputados para debatir sobre diferentes proposiciones no de ley que han presentado algunas formaciones políticas. Entre ellas se encontraba la que ha llevado Vox a la Cámara Baja relativa a la “reversión de la pobreza energética”.
Rocío de Meer, la diputada de Vox por Almería, ha sido la encargada de defender la propuesta y lo ha hecho recordando lo que habían comentado en el pasado otros grupos políticos cuando hubo subidas de la luz y de la energía. “Son el gobierno más antisocial de la historia de España”, ha dicho.
Después todos los grupos políticos han tenido su tiempo de intervención. Cuando llegó el turno de Compromís, el diputado Joan Baldoví ha protagonizado uno de los momentos más llamativos de la sesión plenaria al leerle a las bancadas de la ultraderecha el Evangelio según San Mateo.

«Cómo se atreve Vox a presentar una iniciativa de la pobreza energética, cómo tienen la desfachatez de hablar de hogares pobres sin suministro de energía eléctrica y además pedir un estudio de previsiones”, ha comenzado diciendo Baldoví.
Después, ha recordado a la formación de Santiago Abascal que “facilitan el gobierno de la Comunidad de Madrid y el del Ayuntamiento de Madrid y permiten que 1.800 niños lleven 500 días sin luz”, en referencia a la Cañada Real. “Hay que tener cara”, ha añadido.
Además, también ha hecho referencia a las palabras del consejero y portavoz de la Comunidad de Madrid cuando puso en duda el informe de Cáritas sobre la pobreza. «Permiten que un consejero de Madrid ponga en duda el informe de Cáritas sobre la pobreza y que además hagan mofa y burla diciendo que dónde están los pobres”, ha señalado el diputado de Compromís.
“Luego se llaman cristianos”, ha dicho Baldoví antes de empezar a leer el Evangelio según San Mateo: «Evangelio según San Mateo: ‘Ay de vosotros, fariseos, hipócritas, que cerráis la puerta del cielo para que otros no entren'». «Pues eso, fariseos e hipócritas», ha zanjado Baldoví.
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