«2,8 millones de euros se llevó de Telemadrid»: el corte de Antonio Maestre a Sánchez Dragó 

El periodista Antonio Maestre respondió de forma cortante a Fernando Sánchez Dragó en su paso por Telemadrid.

Fernando Sánchez Dragó publicaba en su cuenta de Twitter: «Soy transexual, soy transracial, soy transversal… ¿Dónde tengo que pedir la subvención?¿Cuánto me darán?».

Con este mensaje trataba de hacer sorna de la ley que se ha aprobado y que fue presentada desde el ministerio de Igualdad, con Irene Montero a la cabeza.

A partir de este, cientos de respuestas se profirieron en repulsa: «Sus comentarios demuestran, entre otras cosas, un deliberado desprecio por la sociedad, de la que se benefició no por méritos propios, sino por el más repugnante enchufismo político. Y sigue igual, con la misma chulería chabacana que le caracteriza», decía un tuitero.

https://twitter.com/CapyMaria/status/1411042191003340807

Otros le recordaban su vinculación con la ultraderecha de Abascal, quien estuvo viviendo a sueldo público bajo el paraguas de Esperanza Aguirre: «Para subvenciones puedes preguntarle a tu colega».

Para subvenciones puedes preguntarle a tu colega. pic.twitter.com/mqGvNAca9B

— Robert del Nilo ®  (@Delnilorobert) July 2, 2021

No obstante, la respuesta que más se viralizo por su mordazidad fue la de Antonio Maestre: «2,8 millones de euros se llevó de Telemadrid».

2,8 millones de euros se llevó de Telemadrid. https://t.co/fgBz8BttdW

— AntonioMaestre (@AntonioMaestre) July 2, 2021

Cabe recordar que en 2016 se denunciaba el «despilfarro» de la televisión regional en sueldos de Sánchez Dragó o Tertsch.

El presidente del comité de empresa de Telemadrid, Luis Lombardo, denunciaba este «despilfarro» en el ente público antes del expediente de regulación de empleo de 2013, que ha vinculado a una «inmensa red clientelar» impulsada por el Gobierno regional encabezado por Esperanza Aguirre.

En su comparecencia en la comisión de estudio de la deuda de la Asamblea de Madrid, Lombardo dijo que el «despilfarro» se inició con el nombramiento de Manuel Soriano como director general de Telemadrid en 2003.

A partir de este momento, indicó que se duplicó el número de directivos, se «infló» el organigrama y aumentaron los cargos de confianza con «salarios bochornosos».