El cambio político ha demostrado su efecto directo en la lucha contra el cambio climático
La esperanza comienza a reverdecer en la Amazonía brasileña, el pulmón vital del planeta. En los primeros seis meses del año 2023, la deforestación ha visto una caída marcada del 33%, el retroceso más pronunciado desde 2019, según informes del Ministerio de Medio Ambiente de Brasil.
Curiosamente, este progreso ambiental se ha gestado bajo la administración del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, un liderazgo que contrasta con la nefasta gestión de su antecesor, Jair Bolsonaro.
EL RELEVO PRESIDENCIAL: UN RESPIRO TEMPORAL PARA LA AMAZONÍA
Lula da Silva asumió las riendas del gigante sudamericano con una política ambiental distinta, en un entorno opuesto a las decisiones ultraliberales y negacionistas de Bolsonaro, que arrastraron a Brasil hacia la peor tala de bosques en 15 años. Bolsonaro, con su intransigencia, apostó por impulsar actividades agrícolas y mineras en áreas protegidas, intentando maquillar su desastrosa política ambiental con una supuesta lucha contra la pobreza. El resultado fue el incremento de la deforestación y una emergencia ambiental global.
Sin embargo, con Lula da Silva en el timón, los vientos parecen cambiar en la Amazonía. El cambio político ha demostrado su efecto directo en la lucha contra el cambio climático. Las decisiones políticas tienen un impacto real y a veces devastador, especialmente cuando líderes ultraderechistas y ultraliberales como Bolsonaro se niegan a reconocer la realidad del cambio climático y la importancia del cuidado del medio ambiente. No debemos olvidar el papel crítico de la Amazonía como sumidero de carbono y su impacto global, albergando a dos tercios del bosque tropical del mundo.
LOS DESAFÍOS CONTINÚAN
A pesar del avance significativo en la lucha contra la deforestación, aún queda un camino empinado por recorrer. El pico anual de devastación de bosques e incendios se avecina entre los meses de julio y septiembre. Las autoridades brasileñas deben estar alerta para evitar un posible rebrote de la deforestación, que podría manchar este logro reciente.
De cara al futuro, la lucha por la preservación del medio ambiente necesita liderazgos firmes y responsables, que entiendan la importancia vital de proteger la biodiversidad. No podemos permitir que figuras ultraderechistas, ultraliberales y negacionistas como Bolsonaro dicten el futuro de nuestro planeta.
Cada una de nosotras o uno de nosotros tiene un papel que desempeñar en la lucha contra la deforestación y el cambio climático. Puedes ayudar también presionando a tus líderes políticos para que tomen medidas serias contra la deforestación y fomentando políticas más verdes y sostenibles en tu comunidad. El poder del pueblo está en el voto, no lo desperdicies.
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