El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha acusado este domingo a la Universidad de Salamanca de ser “una máquina de censura, coacción, adoctrinamiento y antisemitismo” como otras universidades históricas como “Bolonia o Harvard”. Así, sin remilgos.
Lo hizo en Washington durante la Conferencia Política Acción Conservadora, la principal cita del movimiento conservador de Estados Unidos, en la que también han participado los presidentes de Argentina y El Salvador, Javier Milei y Nayib Bukele. Quién organizó todo esto, os preguntaréis. Pues Trump. Menudas 4 patas para un banco. El rector de la Universidad de Salamanca, Ricardo Rivero, ha querido responder al ultra y le ha acusado de tener “una irresponsable ignorancia” sobre la vida institucional de las universidades.
“Quien insulta desde la falta de información a nuestra Universidad, al fin, demuestra poco aprecio por la imagen internacional de España». Rivero reprocha los “ataques” a la universidad española más antigua y que continúa en activo, de la que ha defendido “su dedicación al saber, la creación y transmisión de conocimiento y servicio a la sociedad”. “Las más diversas opiniones y puntos de vista se expresan todos los días respetando los principios del respeto a las personas, la democracia, el pluralismo y la defensa de la Constitución”.
Nos llama especialmente la atención que en 1936, Millán Astray decía lo de «muerte a los intelectuales» en la histórica Universidad de Salamanca a la que hace referencia Abascal, heredero natural de este legado anti-intelectual. La respuesta de Miguel de Unamuno, que tan bien recogió Alejandro Amenabar en «Mientras dure la guerra», aun resuena en los muros de la universidad.
Los tiempos cambian, su ignorancia es la misma.
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