¿Cómo es posible que alguien de izquierdas tenga un IPhone o use Twitter?
No hemos hecho votos de pobreza ni vivimos apartados de la sociedad. Existimos en este mismo mundo, uno que es moldeado por las fuerzas del capitalismo. Nuestra crítica no es hacia la existencia de productos avanzados tecnológicamente, sino a un sistema que permite la concentración excesiva de riqueza y recursos.
Hemos elegido interactuar con este mundo, no rechazarlo por completo. Lo criticamos, buscamos su transformación, pero a la vez, vivimos en él. Queremos ver un cambio hacia un sistema donde el acceso a los bienes no sea exclusividad de unos pocos privilegiados.
Ser de izquierdas y usar productos de una gran compañía no es una contradicción. La verdadera contradicción radica en permitir que un sistema desigual persista sin desafiarlo, sin buscar cambiarlo. Y eso es exactamente lo que intentamos hacer por aquí.
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