En un intento por poner fin a una práctica que ha sido objeto de controversia durante décadas, organizaciones animalistas presentarán una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) en el Congreso de los Diputados de España para derogar la ley que reconoce a la tauromaquia como patrimonio cultural. Esta iniciativa es un paso significativo hacia la abolición de las corridas de toros y otros festejos taurinos, que han sido condenados por su crueldad hacia los animales y su falta de interés entre la población española.
La actual normativa estatal que reconoce a la tauromaquia como patrimonio cultural socava las competencias autonómicas y municipales, privándoles de la capacidad de regular estas prácticas en sus respectivas regiones. Esto significa que los ayuntamientos y autonomías no pueden decidir por sí mismos si desean permitir o prohibir las corridas de toros, lo que va en contra del principio de descentralización y autonomía local.
Una vez que la Mesa del Congreso admita a trámite la proposición, los promotores de la ILP tendrán nueve meses para recopilar 500,000 firmas necesarias para que la iniciativa pueda avanzar en el Congreso. Este es un desafío significativo, pero demuestra la determinación de aquellos que abogan por el fin de la tauromaquia como patrimonio cultural.
La indiferencia
Desde que la tauromaquia fue declarada Patrimonio Cultural hace una década, el número de corridas de toros y otros festejos taurinos no ha hecho más que disminuir. Según el Anuario de Estadísticas Culturales del Ministerio de Cultura, la cantidad de celebraciones taurinas en las plazas se redujo a la mitad en diez años, pasando de 2,684 en 2009 a 1,425 en 2019. Estos números reflejan un declive constante en la popularidad de la tauromaquia, a pesar de los esfuerzos por mantenerla viva.
La encuesta de población realizada por el Ministerio de Cultura en 2018-2019 reveló un hecho importante: el escaso interés de los ciudadanos españoles por los festejos taurinos. Solo el 8% de los encuestados asistió a algún evento taurino, y apenas el 5.8% acudió a un festejo en plaza. De estos últimos, un preocupante 19.6% lo hizo gratis y solo el 5% con descuento. Estos datos demuestran que la tauromaquia no goza de un respaldo generalizado entre la población y que es una tradición que ha perdido relevancia y atractivo.
Si bien en 2022 se registró un leve repunte en el número de festejos en plaza, se argumenta que esto fue en gran parte coyuntural. Factores como el exceso de animales en las ganaderías y la disminución de los salarios de los profesionales taurinos pueden haber contribuido a este aumento temporal. Sin embargo, en 2023, parece que el número de festejos en plaza ha vuelto a disminuir, según datos disponibles hasta el momento.
Netanyahu&Trump: colonialismo del siglo XXI
El imperialismo sin máscaras: la Franja de Gaza como colonia estadounidense
Un estudio revela que el cerebro humano ya contiene una cantidad equivalente a una cuchara entera de nanoplásticos
Más del 50% del plástico fabricado en la historia se produjo desde 2002, y la producción se duplicará en 2040.
La gran estafa legalizada: el 1% más rico paga menos impuestos sobre su renta que los más pobres
Una fiscalidad invertida que exprime a quienes menos tienen mientras alivia a los grandes patrimonios.
FROILÁN: EL OKUPA DE ABU DHABI💸 Marina analiza cómo el nieto del emérito es otro que vive del cuento
Marina Lobo analiza la vida laboral (o su ausencia) de los Borbones millennials: Froilán, el okupa de Abu Dhabi, y Victoria Federica, la influencer más subvencionada de España.
DEL ‘EWOK’ A ‘GAÑORDO’ 😵 ¿Por qué las luchas internas no le pasan factura a la ultraderecha?
Vox pierde piezas, pero sigue en pie. García-Gallardo se suma a la lista de fugados como Macarena Olona, Rocío Monasterio o Espinosa de los Monteros