Ahora más que nunca es necesario dar la cara y organizarse para enfrentar a los monstruos, y dejarles claro que no tienen lugar en el nuevo mundo.
Ya es oficial: las 6 sindicalistas de la pastelería La Suiza de Xixón han sido condenadas a 3 años y medio de prisión. Se trata un paso más en la criminalización de los movimientos sociales y sindicales, abriendo de par en par la puerta a la persecución policial y judicial del sindicalismo y la lucha social. Pero no es el único caso preocupante que hemos vivido en las últimas semanas.
Hemos visto a antifascistas entrar en prisión por manifestarse contra el fascismo, a fascistas quemar locales sociales con total impunidad, a trabajadores acosados judicialmente por defender sus derechos laborales… Hemos llegado incluso a ver como el Ministerio de Interior ha reconocido que infiltran policías en movimientos sociales y ecologistas para “evitar delitos”, a pesar de que ninguno de los movimientos investigados haya cometido ningún delito hasta el momento.
Decía Antonio Gramsci que cuando “el viejo mundo se muere, el nuevo tarda en aparecer. Y en ese claroscuro surgen los monstruos”. Pues bien, nuestro mundo neoliberal quedó tocado de muerte en la crisis del 2008, y lo que vemos ahora por múltiples frentes son esos monstruos intentando mantener artificialmente con vida al antiguo mundo. Por eso debemos responder unidas para desbordar su represión.
Ahora más que nunca es necesario dar la cara y organizarse para enfrentar a los monstruos, y dejarles claro que no tienen lugar en el nuevo mundo.
Related posts
SÍGUENOS
Quién paga realmente tu vuelo barato
Una ganga nunca es una ganga cuando lo que se subvenciona es el colapso social, ecológico y cultural de un país entero.
El sindicato negro que doblegó al imperio
Un puñado de porters negros inició en 1925 una batalla de doce años que unió sindicalismo y emancipación racial contra el racismo y el capital.
Walmart necesita que fracase la huelga de Starbucks porque el sindicalismo les aterra a todas las grandes corporaciones
Cuando una plantilla se organiza, tiemblan Walmart, Amazon, Chevron y todo un ecosistema político-empresarial construido para aplastar derechos laborales.
Vídeo | La DANA que arrasó Valencia y la política que se escondió detrás de una mochila
Marina Lobo desmenuza el caos, las mentiras y la cadena de irresponsables
La mentira humanitaria: cómo Occidente troceó Sudán para después fingir sorpresa
Quinndy Akeju explica la historia que los titulares evitan
Seguir
Seguir
Seguir
Subscribe
Seguir