La Justicia envía a prisión el abogado suspendido por engañar a clientes.
El abogado que quiso llevar al Gobierno central a los tribunales por haber permitido la celebración del 8M ha ingresado a prisión al ser condenado por estafa.
Según ha podido saber elDiario.es, el letrado Víctor Valladares se encuentra preso en la cárcel madrileña de Soto del Real, pero, además, aún tiene causas pendientes por estafa.

El delito de Valladares resulta el de haber falsificado documentos judiciales para engañar a sus clientes. De este modo la Fiscalía pide tres años de cárcel y la acusación popular un total de 13 años de presidio por delitos de falsedad documental, estafa, intrusismo profesional, deslealtad profesional y suplantación de identidad.
“Este gobierno se merece una condena penal ante tanto muerto”, decía en junio de 2020 en el diario El Mundo, asegurando que acababa de constituir una asociación que iba a demandar al Gobierno por la gestión de la pandemia.
En ese momento PP y Vox recurrieron a su figura para escampar ‘fango’ en la conciencia social y incentivar el descontento.
El escándalo, sin embargo, ha resultado ser todos los juicios por dichos motivos se le acumula Valaldares, quien ha sido capaz de quedarse el dinero que, presuntamente, iba para una procuradora, dejar morir un caso, falsificar papeles, engañar sobre la situación judicial de los casos, etc.
Related posts
El director del FBI se hace más rico jugando a dos bandas: invierte en China desde un paraíso fiscal
Kash Patel o cómo la seguridad nacional se pone al servicio del capital offshore.
El Libro Beige de la Reserva Federal expone el primer saldo del proteccionismo y la xenofobia de Trump
Empleo público destruido, turismo en caída y sectores sin mano de obra: los primeros efectos del dogmatismo impuesto por Donald Trump
Carlos Herrera o los “patriotas” que se cuelan en la fila del fisco
Herrera usó un entramado de sociedades pantalla para eludir 2,1 millones en impuestos, según la Audiencia Nacional
Vídeo | DE RESIGNIFICAR NADA 🧼 PSOEizando, que es gerundio. Marina Lobo y Esther López Barceló
La “resignificación” del Valle de los Caídos que vende Moncloa es un eufemismo para disfrazar la continuidad del relato franquista.