Granada habló y el fascismo volvió a perder. Vito Quiles intentó convertir la Universidad en su plató, pero se encontró con una juventud que no compra discursos del odio ni selfies con banderas del pollo. Mientras él gritaba “libertad” rodeado de policía, centenares de estudiantes respondían con dignidad: El fascismo no pasará por la universidad.
Related posts
SÍGUENOS
Ribera Salud y el precio del silencio: cuatro despidos para proteger un negocio que juega con la salud pública
Cuatro directivos alertaron de una “vulneración de derechos” y la respuesta fue el despido fulminante. Un sistema público secuestrado por la rentabilidad.
Extremadura entra en combustión política: Guardiola lanza un órdago para huir de Vox y puede acabar atrapada por su propia jugada
Un adelanto electoral presentado como gesto de autoridad puede convertirse en una trampa perfecta que devuelva a Extremadura al mismo bloqueo que dice querer evitar.
Cuando privatizar la salud significa calcular quién vive y quién no
Ayuso paga el negocio y la ciudadanía paga el precio
Vídeo | La DANA que arrasó Valencia y la política que se escondió detrás de una mochila
Marina Lobo desmenuza el caos, las mentiras y la cadena de irresponsables
La mentira humanitaria: cómo Occidente troceó Sudán para después fingir sorpresa
Quinndy Akeju explica la historia que los titulares evitan
Seguir
Seguir
Seguir
Subscribe
Seguir