Bajo la bandera del patriotismo se ocultan intenciones que poco tienen que ver con el bienestar común y mucho con la preservación de privilegios.
El eterno Fernando Fernán Gómez, cuando recordó estas palabras de Gila, nos invitaba a reflexionar sobre cómo el patriotismo, ese sentimiento que debería ser noble de amor hacia la patria, puede ser manipulado y convertido en una herramienta al servicio de quienes detentan el poder. Nos hace ver que, bajo la bandera del patriotismo, se ocultan intenciones que poco tienen que ver con el bienestar común y mucho con la preservación de privilegios.
Recordar hoy estas palabras de Gila es, sin duda, un acto de homenaje, pero también un recordatorio de la vigencia de su mensaje. Mantente alerta, las banderas solo son trapos; y la patria es el pueblo.
Related posts
SÍGUENOS
Milei se rinde al dólar: volantazo desesperado con aval del FMI
El gobierno que prometía “no intervenir jamás en el mercado” se arrodilla ante la divisa y dinamita su propio dogma.
Cómo frenar el hambre en Gaza
El genocidio se sostiene sobre un crimen antiguo: convertir la comida en un arma. Frenarlo es una obligación colectiva.
Aznar dicta y Feijóo obedece: FAES llama “emboscada” al pacto climático mientras el PP arde en sus propias cenizas
El laboratorio ideológico de Aznar protege a los barones del PP y convierte la prevención de incendios en munición política, mientras las comunidades gobernadas por la derecha suman récords de abandono forestal.
Vídeo | Queremos más Chikahiros
No hay pancartas masivas ni focos mediáticos. Solo un chef japonés que cada semana se planta ante la embajada de Israel en Tokio y repite lo mismo: “Parad el genodicio”. Una voz sola que vale por miles. Queremos más Chikahiros.
Vídeo | El negocio de matar
Palantir vende tecnología, pero lo que compra el ejército israelí es impunidad: un algoritmo que legitima la masacre. Cada contrato firmado es un misil que despega. Cada sonrisa de Karp es una fosa abierta.