La ultraderecha hace uso de las teorías de la conspiración con voluntad política.
En una entrevista publicada en el medio Contrainformación, el periodista y autor del libro ‘El pensamiento conspiranoico’, Noel Ceballos, explicaba el funcionamiento de las teorías, que son utilizadas por la ultraderecha para ganar votos.
Entrevista a @noelceballos_ : "El populismo de ultraderecha lleva años utilizando teorías de la conspiración como herramienta para pescar votos entre personas decepcionadas con un sistema incapaz de prometerles un futuro". Por Ricard Jiménez (@Erre_deJota) https://t.co/1Bjl29ilnp
— Marcos ? (@ajm74ajm) September 8, 2021
«Ante incertezas y seguridades aparecen teorías a las que agarrarse como un clavo ardiendo. Una sociedad nihilista, diría Nietzsche, tras matar a Dios se encuentra a la deriva. Las teorías de la conspiración hacen de soporte moral o emocional de tantos que son incapaces de sobrellevar la decadencia fluctuante», se explica en el medio a modo de introducción.
«La historia – explica Noel Ceballo – nos enseña que la conspiranoia prospera muchísimo en momentos de crisis, cambios de paradigma e incertidumbre social».

Un ejemplo reciente puede extrapolarse en el momento previo a la irrupción del COVID-19, cuando «ya empezaba crecer, especialmente en los Estados Unidos de Donald Trump y Qanon». Sin embargo, es «a partir de marzo de 2020 todo adquirió un cariz completamente diferente. Fue como intentar apagar un incendio con napalm».
Una de las características principales de la conspiración, explica Ceballos, es sues «flexibilidad, esa capacidad de encajar los hechos dentro de la teoría, y no al revés».
Estas teorías» son utilizadas por el populismo de derechas», añade el periodista, ya que «le dicen a sus votantes que todas sus pesadillas conspiranoicas sobre la clase política son ciertas, que existe una élite minoritaria manejando en secreto los hilos del mundo».
De este modo, concluye, este «populismo lleva años utilizando las teorías de la conspiración como herramienta para pescar votos entre todas aquellas personas que, decepcionadas con un sistema incapaz de prometerles un futuro, están dispuestas a abrazar fórmulas inciertas y potencialmente peligrosas de antipolítica».
Related posts
SÍGUENOS
Las horas más bajas de Ursula
Dos bloques opuestos han coincidido en algo: pedir la cabeza de Ursula von der Leyen. Y no es una pataleta: tienen 72 firmas, el mínimo legal para forzar el debate.
Vox y la violencia que nunca quiere ver
El alcalde de Villacastín, detenido por agredir a su mujer en plena romería Otra vez Vox. Otra vez la violencia que su discurso niega mientras se enquista en sus filas. Julio César Sánchez, alcalde del partido ultra en Villacastín (Segovia), fue detenido por la Guardia…
Milei, contra las cuerdas
El peronismo conquista seis de las ocho secciones electorales y abre una grieta en el proyecto de odio del Gobierno nacional.
Vídeo | Queremos más Chikahiros
No hay pancartas masivas ni focos mediáticos. Solo un chef japonés que cada semana se planta ante la embajada de Israel en Tokio y repite lo mismo: “Parad el genodicio”. Una voz sola que vale por miles. Queremos más Chikahiros.
Vídeo | El negocio de matar
Palantir vende tecnología, pero lo que compra el ejército israelí es impunidad: un algoritmo que legitima la masacre. Cada contrato firmado es un misil que despega. Cada sonrisa de Karp es una fosa abierta.