La acción busca trascender el momento actual, apelando a una conciencia global sobre la urgencia de la paz y la justicia para Palestina
Un grupo de activistas se congregó frente a la icónica obra de Picasso, ‘Guernica’, en el Museo Reina Sofía de Madrid. Este encuentro tuvo lugar como respuesta directa a la negativa del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de aceptar propuestas de alto el fuego, y su anuncio de un inminente ataque sobre Rafah, una zona densamente poblada por refugiados palestinos.
La protesta frente a esta obra, mediante el uso de banderas palestinas y kufiyas, establece un paralelismo entre el ataque histórico a Guernica y los ataques actuales en Gaza. Ambos representan momentos en los que las poblaciones civiles han sido los objetivos y las principales víctimas de conflictos bélicos, sufriendo las consecuencias de decisiones políticas y militares tomadas lejos de sus hogares. El ‘Guernica’ de Picasso, por lo tanto, se convierte en un espejo que refleja el dolor y la desesperación de otra comunidad que, en un lugar y tiempo diferentes, experimenta horrores similares a los que el cuadro busca condenar.
Al situar el conflicto palestino-israelí en el contexto del simbolismo del ‘Guernica’, los activistas subrayan la continuidad de la resistencia contra la opresión y la importancia de la solidaridad internacional. La acción busca trascender el momento actual, apelando a una conciencia global sobre la urgencia de la paz y la justicia para Palestina
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