Ayer Elon Musk dio un paso más hacia la radicalización. En la toma de posesión de Donald Trump, Musk hizo un gesto que muchos señalaron como saludo na*i. Él lo niega y lo disfraza de “ironía” o “malentendido”, pero la extrema derecha lo celebra.
No es un caso aislado: Musk lleva años financiando a partidos ultraderechistas como AfD, imponiendo un algoritmo que amplifica el odio en X, y negando la existencia de su propia hija trans. Todo esto mientras refuerza alianzas con Trump y consolida su poder como el “tecnócrata supremo”. Los fascismos de hoy no llegan con botas y marchas militares. Llegan con algoritmos, con CEOs que controlan redes y con discursos que normalizan lo intolerable.
Y mientras Elon juega con la ironía, el terreno está preparado para que lo impensable se convierta en ley.
Related posts
2 Comments
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
83% de las personas asesinadas en Gaza eran civiles: la mentira de la “guerra limpia” israelí
Los datos secretos del propio ejército israelí desmontan el relato oficial: el asedio a Gaza es un genocidio planificado, con un índice de matanza civil pocas veces visto en la historia reciente.
El naufragio del Cybertruck: cuando el juguete de Musk se convierte en un problema financiero
De icono futurista a chatarra cara: el vehículo que iba a revolucionar la movilidad eléctrica es hoy un fracaso asegurado.
La gran sumisión: Europa abre sus fronteras al cerdo de Trump
Un acuerdo desigual que entrega la soberanía económica de la UE a Washington
Vídeo | París marca el camino
París acaba de plantar un bosque en pleno centro. Donde antes había cemento y calor, ahora hay sombra, frescor y vida. Si ellos pueden, ¿qué excusa tienen nuestras ciudades? La crisis climática no espera: lo público debe apostar por espacios verdes, habitables y resilientes.
Vídeo | Jefaza
Cuando la ciudadanía se rebela, cuando una mujer de 87 años se atreve a pegar una pegatina contra el genocidio, mandan a cinco policías a por ella como si fuera peligrosa.
Manuel David Brito Perez, tenemos que preocuparnos, pero sobre todo ocuparnos de no permitir a estia fascistas, por mucho dinero y poder que tengan, a campar a dus anchas, tengamos presente que torres tan altas como el, y aun mucho más altas han caido, y él no va a ser una excepción, está en nanis de todas kas personas de bien que somos muchas más que ellos y que las que les apoyan.
Dejémonos de historias….si parece raro.se ve raro.huele raro…..es raro….levtraiciono el subconsciente y hizo lo que piensa