En una manifestación simbólica, activistas de la campaña «Fin del comercio de armas con Israel« han entregado ramos de rosas negras en las sedes centrales del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en diversas ciudades de España. Este gesto, cargado de significado, busca no solo expresar duelo por las vidas perdidas en la Franja de Gaza, sino también demandar una acción firme por parte del gobierno español.
Las rosas negras, tradicionalmente un símbolo del PSOE, han sido utilizadas en esta ocasión para representar el luto por las más de 30,000 personas palestinas, incluyendo numerosos menores, que han perdido la vida en conflictos en la región. El acto de entrega de las rosas negras ha sido respaldado por 400 organizaciones de todo el país, reflejando un amplio apoyo a la causa.
La campaña destaca que cualquier tipo de comercio de armas con Israel contribuye directamente al sufrimiento en Gaza y, en última instancia, al genocidio. Por lo tanto, exigen la suspensión inmediata y definitiva de estas transacciones, argumentando que es una cuestión de ética y humanidad.
Este llamado a la acción llega poco después de que la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados español aprobara una Propuesta No de Ley que aboga por el fin del comercio de armas con Israel. Sin embargo, los activistas consideran que esta medida debe ir más allá de las declaraciones políticas y traducirse en acciones concretas por parte del gobierno.
El PSOE, como principal partido en el gobierno, se encuentra en una posición clave para impulsar esta causa. Los activistas instan a las bases socialistas a que ejerzan presión desde dentro del partido, exigiendo un embargo total a través de los órganos internos del PSOE o mediante pronunciamientos públicos. Consideran que el respaldo de las bases socialistas puede ser crucial para poner fin al sufrimiento en Gaza y contribuir a la construcción de un mundo más justo y pacífico.
Related posts
El protocolo Sheeran: cómo sobrevivir al colapso sin un puto móvil
La renuncia de Ed Sheeran al teléfono no es excentricidad: es resistencia frente a una sociedad que confunde productividad con existencia.
Una camiseta que decía ‘Palestine’ y un Parlamento que no tolera la disidencia
Cansın Köktürk fue expulsada del Bundestag por llevar una camiseta, pero el problema no era la ropa: era Palestina.
El exterminio ya no es tabú: casi la mitad de la población judía israelí apoya matar a todos los palestinos de Gaza
Una encuesta revela el colapso ético de una sociedad que ha normalizado el genocidio como política de Estado
Maternidad o barbarie
La libertad de no ser madre no debería escandalizar a nadie en 2025. Y sin embargo…
Vídeo | Hasbara: blanqueando el genocidio
Mientras bombardea Gaza, el Estado israelí despliega una campaña global de imagen financiada con dinero público, desde los escenarios hasta los algoritmos