Inda lleva años confundiendo la libertad de prensa con la licencia para difamar.
Sí, familia, Eduardo Inda sigue vivo.
Sigue en la tele, sigue en Ana Rosa, sigue en su cruzada contra cualquier persona que tenga una neurona en funcionamiento.
Esta vez le ha tocado a la jueza de Catarroja, la magistrada que investiga la gestión política y las posibles negligencias durante la DANA que dejó 229 personas muertas en el País Valencià.
Una tragedia en la que el president Carlos Mazón desapareció durante horas, y de la que todavía nadie del gobierno autonómico ha asumido responsabilidades.
Pero claro, en el universo Inda, el problema no es que haya muertos, ni que haya negligencias, ni que la justicia investigue.
El problema es que la jueza es “roja”.
Porque si no estás con ellos, estás contra ellos.
Y si investigas, ya eres sospechosa.
Inda lleva años confundiendo la libertad de prensa con la licencia para difamar.
Y ahora quiere hacer lo mismo con la justicia: convertir la independencia judicial en una conspiración socialista.
Si una jueza cumple la ley y eso incomoda a un político del PP, entonces para Inda es “roja”.
La derecha mediática no busca verdad ni justicia. Busca impunidad.
Necesitan que nadie se atreva a investigarles.
Por eso atacan a la jueza, como antes atacaron a fiscales, sanitarias o periodistas que no se vendieron.
Pero hay algo que a Inda le escapa:
La jueza no está en una tertulia. Está en un juzgado.
Y ahí no sirven los gritos ni las teorías conspiranoicas.
Ahí solo valen los hechos.
Y los hechos son que hubo 229 muertos, hubo decisiones políticas, y hay una investigación en marcha.
Así que sí, Inda sigue vivo.
Sigue gritando, mintiendo y haciendo ruido.
Pero cada vez hay más gente que ya no le escucha.
Y eso, Eduardo, es lo más rojo que te va a pasar en la vida.
Related posts
SÍGUENOS
Quién paga realmente tu vuelo barato
Una ganga nunca es una ganga cuando lo que se subvenciona es el colapso social, ecológico y cultural de un país entero.
El sindicato negro que doblegó al imperio
Un puñado de porters negros inició en 1925 una batalla de doce años que unió sindicalismo y emancipación racial contra el racismo y el capital.
Walmart necesita que fracase la huelga de Starbucks porque el sindicalismo les aterra a todas las grandes corporaciones
Cuando una plantilla se organiza, tiemblan Walmart, Amazon, Chevron y todo un ecosistema político-empresarial construido para aplastar derechos laborales.
Vídeo | La DANA que arrasó Valencia y la política que se escondió detrás de una mochila
Marina Lobo desmenuza el caos, las mentiras y la cadena de irresponsables
La mentira humanitaria: cómo Occidente troceó Sudán para después fingir sorpresa
Quinndy Akeju explica la historia que los titulares evitan
Seguir
Seguir
Seguir
Subscribe
Seguir