23 Abr 2024
DERECHOS Y LIBERTADES, DESTACADA

Censura en Youtube: restringe varios vídeos con testimonios de los supervivientes españoles de los campos de concentración nazis 

El periodista Carlos Hernández apeló la decisión, pero YouTube ha decidido mantener la restricción porque «no es apropiado para todo el mundo, particularmente para personas menores» a pesar de que son vídeos que se exhiben a día de hoy en los centros educativos

YouTube ha impuesto una restricción a varios vídeos del periodista Carlos Hernández, creador del canal Deportados al considerar que los testimonios de los deportados españoles que narran en primera persona el horror sufrido en los campos de concentración nazis son solo para mayores de edad.

Los vídeos subidos a la plataforma incluyen ahora un aviso de que solo están disponibles para mayores de 18 años, por lo tanto es imprescindible tener una cuenta e iniciar sesión para verlos y no pueden visualizarse desde páginas de terceros que los hayan insertado.

YouTube desde hace unos días está avisando al periodista de que ha decidido aplicar esta limitación a sus vídeos porque «no cumplen las normas de la comunidad». Por su parte, Hernández ha escrito a través de Twitter que: «Esta semana seguiré intentando que YouTube, YouTubeTeam explique las razones concretas por las que considera «inapropiados para jóvenes» los testimonios de los supervivientes españoles de los campos de concentración nazis.»

Además, gracias a  @RT_com, Hernández, ha explicado el escándalo. «YouTube ha censurado, ha restringido el acceso a los vídeos que tenía ya colgados en esa plataforma desde hacía varios años en los que daba voz a los últimos supervivientes españoles de los campos de concentración nazis, supervivientes del Holocausto, supervivientes del horror del fascismo que se limitaban a contar su historia».

YouTube restringe varios vídeos del periodista Carlos Hernández con testimonios de los supervivientes españoles de los campos de concentración nazis porque "no cumplen las normas de la comunidad"

«La única respuesta hasta ahora que he tenido a través de redes sociales a través de mi queja ha sido que infringía las normas de la comunidad y he apelado, a través del propio formulario que te permite hacer la gente de esta plataforma, y, sin embargo, ya he recibido hace muy poquito la respuesta de YouTube que rechazan mi apelación y que, por lo tanto, van a mantener restringidos el acceso a estos vídeos».

«Son vídeos de supervivientes del Holocausto, son vídeos que se exhiben a día de hoy en los centros educativos. Son vídeos que me conta que hay muchos profesores españoles que los ponen en clase para sus alumnos de menos de 18 años».

Vídeos sobre neonazis. sí. Denunciando el nazismo, no

En cuanto a cuál cree que es la vara de medir de Youtube para restringir o no los vídeos, Carlos Hernández señala: «A mí me sorprende especialmente porque cualquiera que visite esa plataforma se encuentra con vídeos donde neonazis, donde fascistas están impunemente lanzando su discurso a todas horas. Donde hay, por ejemplo, una humillación constante a las mujeres, donde hay un fomento del odio hacia el inmigrante o de racismo puro y duro y esos vídeos están ahí sin que nadie los censure, sin que nadie los elimine y, sin embargo, este tipo de vídeos que son imprescindibles para que los jóvenes conozcan lo que fue el horror del nazismo, del horror de los campos de concentración nazis, bueno, pues esos vídeos que deberían servir para que los jóvenes conozcan aquel horror están siendo eliminados y está siendo restringido el acceso a ellos».

Youtube

Como conclusión, el periodista indica que «esto debería servir como una alerta más, una alerta más sobre el poder tremendo que tienen estas empresas, que son empresas privadas obviamente, y a los que les hemos entregado nuestra vida. Ellos tienen la llave para decirnos qué podemos ver y qué no podemos ver. Claro, eso es algo peligrosísimo cuando son empresas privadas que no están sometidas a ningún tipo de control. A mí me parece que puede constituir, ya a corto plazo pero sobre todo a medio plazo, una gran amenaza para la democracia».

Ya en 2019 denunció que la plataforma había restringido e incluso borrado algunos vídeos de la misma temática y que solo después de denunciarlo públicamente restituyó algunos de ellos, aunque no todos.

Vídeos imprescindibles para no olvidar

Los vídeos tienen por objetivo rescatar los testimonios olvidados de los ex prisioneros españoles de los campos de Hitler, y en ellos se intercala su experiencia con imágenes de lo que allí ocurría, entre ellas fotografías de desnudos y cadáveres de fallecidos. «Es inexplicable. No creo que haya alguien en Silicon Valley que haya tomado esta decisión premeditadamente, pero con esta política la consecuencia es que están tapando la historia y haciéndole un favor al fascismo, al nazismo y al franquismo. Ese es el objetivo que están cumpliendo, ayudar a los negacionistas y ocultar lo que ha pasado, y ocultárselo al público que más lo requiere, los jóvenes», lamenta Hernández en conversación con elDiario.es.

Hoy podemos conocer estas historias gracias a que Hernández realizó estas entrevistas para su libro Los últimos españoles de Mauthausen y las recopiló junto a material audiovisual y documental en la web Deportados, donde están a libre disposición del público. El también autor de Los campos de concentración de Franco ha seguido la vida de muchos de estos antifascistas republicanos y ha contado en elDiario.es cómo con el paso del tiempo han ido falleciendo. Ya ninguno de los que pudieron contarlo queda vivo, el último fue Juan Romero, que murió en octubre de 2020.

Todos cuentan en los vídeos, las torturas, los malos tratos, el hambre, el trabajo esclavo, los experimentos médicos realizados por los SS de Hitler y las muertes de compañeros, familiares y amigos que sufrieron. Su historia comienza en España, con el golpe de Estado de Franco, y sigue con el exilio francés y la Segunda Guerra Mundial, en la que pelearon contra el fascismo. Pero tras la liberación de los campos por parte de los aliados, los ex prisioneros españoles no pudieron volver a casa. Aún la dictadura franquista se extendería 30 años. La mayoría ha muerto en el exilio, sin honores y reconocimiento. Hubo que esperar a agosto de 2020 para ver un homenaje del Gobierno español a uno de los deportados, el último en morir, tal y como informa elDiario.es.

El propio periodista lo cuenta en su cuenta de Twitter: