23 Abr 2024
DESTACADA, POLÍTICA ESTATAL

«Tengo la convicción total de que Lorca está aquí»: Ian Gibson destapa una grabación inédita del enterrador que sepultó al poeta 

«Aquí no están más que esos [refiriéndose a los enterrados]. El maestro de escuelas de Pulianas, los dos hijos, el Galadí, el Cabezas y Lorca», relata a Gibson el enterrador

5 años del asesinato del dramaturgo y poeta andaluz Federico García Lorca, y todavía el lugar donde se encuentra su cuerpo es una incógnita. Sin embargo, una grabación destapada por el historiador Ian Gibson trae un poco de esperanza a quienes queremos que sus restos descansen lejos de una fosa común.

Gibson, nacionalizado español desde 1984 y especialista en historia contemporánea española, está convencido de saber cuál es el lugar exacto donde está enterrado el cuerpo del poeta: cerca de la acequia de Aynadamar, a las afueras de Alfacar (Granada), justo en el parque que hoy lleva el nombre del poeta.

En realidad, hace ya cincuenta años que el historiador publicó esta información en su libro ‘La muerte de Federico García Lorca. La represión nacionalista de Granada en 1936’, pero la grabación sobre la que Gibson basa esta información no había visto la luz hasta ahora.

Lorca
Ian Gibson y Lorca. Imágenes libres de derechos a través de Flickr

La grabación en cuestión es la del propio sepulturero de Lorca, que detalla con pelos y señales el paradero del cuerpo que él mismo enterró. Se recoge en el documental ‘Donde acaba la memoria’, de Pablo Romero-Fresco, y a la grabación ha tenido acceso elDiario.es.

Ni un segundo en afirmarlo

«Aquí no están más que esos [refiriéndose a los enterrados]. El maestro de escuelas de Pulianas, los dos hijos, el Galadí, el Cabezas y Lorca», relata a Gibson el enterrador en la grabación recogida en 1978. «¿Tú tienes la convicción total?», pregunta Gibson. Manuel Castilla no tarda ni un segundo en responderle que sí con rotundidad, según recoge el medio.

Gibson confía profundamente en el testimonio del enterrador y, con el tiempo, ha ido variando ligeramente la ubicación posible del cuerpo basándose en el trabajo de Luis Avial, apoyado en técnicas de georradar y en un nuevos testimonios que rescató el periodista Víctor Fernández.