20 Abr 2024
DERECHOS Y LIBERTADES, DESTACADA

Un cura canario culpa del asesinato de las niñas de Tenerife a la «infidelidad» de la madre 

El Cabildo de Gran Canaria quiere presentar una denuncia ante la Fiscalía por lo que ha dicho el párroco

Este domingo, el polémico Padre Báez difundió por redes sociales un mensaje de justificación del asesinato de Anna y Olivia a manos de su padre, Tomás Gimeno, en el que culpa de este suceso a la “infidelidad” de la madre de las niñas, Beatriz Zimmermann.

El párroco considera que el presunto asesino es otra víctima por la ruptura matrimonial y aseguró que las niñas estarían vivas si la madre no hubiera roto el matrimonio. Asimismo llega a decir que «antes el hombre aguantaba a las mujeres aunque se volvieran locas» y que la madre «recoge lo que sembró», considerando que la relación de la madre de las niñas con otra pareja es «robar hijos».

El Cabildo de Gran Canaria está recabando la documentación necesaria para presentar una denuncia ante la Fiscalía, contra Fernando Báez Santana, conocido como el «padre Báez», para que investigue y califique los hechos referidos a sus manifestaciones que justifican el último crimen de «violencia vicaria». Asimismo, el presidente insular Antonio Morales, ha señalado su preocupación por este asunto a las autoridades eclesiásticas.La Consejería de Igualdad, Diversidad y Transparencia de la Corporación Insular, dirigida por Sara Ramírez Mesa, también está haciendo una recopilación de las intervenciones del «padre Báez» en relación a este caso.

Un cura canario culpa del asesinato de las niñas de Tenerife a la "infidelidad" de la madre

A pesar de que el mensaje fue retirado por Báez de Facebook, algunos de sus seguidores hicieron captura de la imagen. El Cabildo señala en un comunicado que se planteará solicitar por vía judicial la recuperación de ese texto, que coincide con otras manifestaciones realizadas por el mismo sujeto en video y radio, referidas al caso.

En el texto, tal y como recoge Canarias7, Báez presenta a Antonio, el segundo nombre Tomás Gimeno, como víctima del sufrimiento al saber que perdería a sus hijas por la ruptura de la relación con Beatriz y la presencia de otro hombre en la vida de la mujer.

«Paremos rupturas matrimoniales, reforcemos la fidelidad, no entreguemos hijos de un padre a otro, y evitaremos tragedias», escribe el sacerdote. Y añade que el asesino «se quitó de en medio para no seguir sufriendo». Asimismo, Báez escribe que a ver si hay un psicólogo con «cojones» para corroborar lo que él afirma.

Texto difundido en redes por el sacerdote y publicado por LA PROVINCIA
Texto difundido en redes por el sacerdote y publicado por LA PROVINCIA

Los representantes insulares han manifestado su absoluta repulsa ante las declaraciones del sacerdote que utiliza los medios de comunicación y plataformas de redes sociales para transmitir mensajes machistas y de justificación de la violencia de género. «La actuación de este sacerdote es muy peligrosa por la representación religiosa que ostenta, y porque desde su catequesis predica mensajes contrarios a la igualdad entre los géneros, a la legislación vigente y a los principios éticos más elementales», señala el Cabildo. El rechazo social también ha sido inmediato.

Por su parte, a última hora del domingo, la Diócesis de Canarias ha emitido un comunicado al respecto que dice así:

El Obispado de Canarias, en nombre del Obispo de la Diócesis, Mon. José Mazuelos, y de toda la comunidad diocesana desea expresar públicamente su dolor ante los sucesos acaecidos en Tenerife y de los que han sido víctimas las pequeñas Olivia y Anna. A la vez quiere comunicar su rechazo tajante ante las indignas manifestaciones que en las últimas horas ha expresado el sacerdote D. Fernando Báez.

Lamentamos profundamente y pedimos perdón por el dolor que estas declaraciones han ocasionado. Rechazamos y desautorizamos dichas opiniones personales que no reflejan los sentimientos de esta comunidad eclesial.

Desde este Obispado expresamos nuestra clara repulsa ante todo tipo de violencia, de manera especial a la que afectan a niños e inocentes y, en este caso la “violencia vicaria” utilizada como medio para hacer daño a la madre.

Nos unimos al dolor de Beatriz, su madre. Rezamos a Dios para que consiga consuelo en momentos tan trágicos y sepa encontrar la paz ante tanto sufrimiento y al del resto de los familiares de Olivia y Anna con el deseo de que encuentren en el amor familiar la fuerza necesaria para superar este terrible trance.